Súper desayuno de día de fiesta
«Cuide su cuerpo. Es el único sitio que usted tiene para vivir.” -Jim Rohn-
La importancia de un buen desayuno
El desayuno es la comida más importante del día. O al menos debería serlo. Nos aporta la energía necesaria para empezar un nuevo día y reactivar muchas funciones cerebrales que “se duermen” durante la noche.
Todos los estudios médicos demuestran que un desayuno completo está ligado a un mejor rendimiento físico y psíquico.
Y curiosamente los niños que desayunan bien en la mañana tienen menos problema de sobrepeso que los que no toman nada.
Aunque eso es difícil de conseguir cuando se levantan tan temprano para ir al cole…
Súperdesayuno de día de fiesta
Hoy es fiesta nacional en México. Se celebra el natalicio de Benito Juárez (21 Marzo 1806- 18 Julio 1872). Fue presidente de México entre los años 1858 a 1872.
En realidad la fiesta sería mañana pero la han pasado a hoy por aquello de los puentes.
Por eso hoy no hay cole. Y es un día propicio para hacer en familia un súper-desayuno casero, rico y nutritivo.
Hay dos cosas a tener en cuenta antes de preparar el desayuno. Primero ver que ingredientes tienes en la nevera y después, en función de lo que haya, preguntar que les apetece.
Hoy hemos preparado unas omelettes o tortillas al horno muy fáciles y ricas. A unas les hemos puesto pavo y queso y a otras salmón ahumado. Los restos que nos quedaban en el refri.
Las he puesto en un molde para cupcakes al horno 10 minutos y listo.
Para el jugo natural hemos utilizado naranjas, restos de piña natural que nos quedaban y un poco de zanahoria.
Siempre suelo hacerlo con las fruta que está más madura y que se puede estropear antes.
Y luego a los niños les apetecía hoy pan con aceite, tomate y jamón serrano. Típico desayuno español.
Es importante no usar pan dulce y siempre un buen aceite de oliva virgen extra. Yo uso para estos súper desayunos el de Castillo de Canena. Es uno de los mejores aceites del mundo.
Y lo podéis conseguir aquí en Cancún en La Europea o en el Chedraui Selecto.
Luego le añadimos unas nueces, unos arándanos y un poco de fruta fresca (manzana y mango en este caso).
Y con eso tenemos ya el resultado final. Un buen desayuno, preparado en familia, aprovechando ingredientes y restos que había en el refri y sobre todo, muy sano y muy, muy rico.
Os animo a probarlo.
Qué paséis un bonito día
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