Siempre me ha gustado más comer que cocinar. Porque teniendo la madre que tengo es prácticamente imposible no apreciar la buena comida y no intentar aprender y reproducir algunos de sus platos. Cuando vivíamos en España, los niños comían en el colegio y mi madre me tenía bien surtido el frigo de sus ricas croquetas, sopas y otras delicias caseras. Al llegar aquí, tengo que cocinar todos los días. Los niños comen, meriendan y cenan en casa, además del típico lunch que hay que llevar al cole.

Así es que me he tenido que poner manos a la obra…con los ingredientes que hay aquí, a hacer fusión comida española y mejicana. Y lo estoy consiguiendo. Con mucha imaginación, paciencia y buscando platos que sean saludables, fáciles de cocinar y sobre todo que estén ricos.

También me gusta que de vez en cuando pongamos mesas bonitas y la comida se convierta en una reunión familiar o de amigos, para compartir y pasar un buen rato. Y muchos de estas cosas las hago con la ayuda de mis hijos, sobre todo del mayor que le encanta la cocina.

Compartiré recetas caseras, fáciles y ricas, y sobre todo para cocinar en familia. Eso sí, no me responsabilizo como quede la cocina después, eso será tarea vuestra.